PARES
MÉXICO

El sabor a frambuesa y pomarrosa son deliciosos recuerdos de la casa de mi abuela paterna, durante mi niñez, toda era magia. Recuerdo muchos detalles: el diseño de los pisos, la baldosa del baño, el color y la textura del sofá, los olores: a maní (cacahuate) recién tostado, a cajones de madera y a dulces que tenía en tarros metálicos. En especial recuerdo la gran cantidad de fotografías tomadas por ella que exhibía en tapices de telar manual suspendidos del techo de su habitación. Y una gran pared con las fotografías de mis bisabuelos y tatarabuelos en la sala, por los cuales yo preguntaba una y otra vez para aprenderme sus nombres. En especial recuerdo una imagen formada por cuatro acetatos: cian, magenta, amarillo y negro que al unirse formaban los colores de una imagen que perteneció al periódico dónde el ex esposo de mi tía trabajó por años.

 

Ahora estoy segura que esas imágenes me han ido conduciendo por el camino fotográfico, desde hace 8 años cuando en una reflexión después de estar desempeñándome como Diseñadora Industrial, egresada de la Universidad Nacional de Colombia, observé y recordé que desde pequeña me sentía maravillada por la fotografía. Decidí comprar una cámara, recordar mis clases de fotografía análoga y comenzar nuevamente a estudiar. Son varios los lugares en los que he estudiado, desde las clases de cursos libres en la Universidad Nacional de Colombia durante mi pregrado, la Alianza Francesa de Bogotá, Zona Cinco Escuela de Fotografía, Alianza Francesa Quito y mi paso por la Octava Cohorte de Especialistas en Fotografía de la Universidad Nacional de Colombia de 2015. Alma Mater queridísima.

 

La fotografía me ancla al presente, es preciso habitar ese presente perfecto continuo para estar alerta y ver las imágenes justo en el suceder, el momento es efímero, es incierto. Se puede proyectar, construir y programar, pero solo se puede capturar en la esencia del presente. La fotografía me conecta con la vida. Las veo como un devenir de sincronías, encuentros y despedidas de personas, lugares y situaciones, que fluyen constantemente. La fotografía aparece, entre otras, como la posibilidad de congelar lo imparable y de contener y detener ilusoriamente lo transitorio, así como explorar el mundo y los mundos que percibo desde el corazón.

 

Como fotógrafa he sido Becaria de AMEXCID para desarrollar la obra PARES. Fui ganadora del II concurso Día Nacional de la Fotografía, Canon Experience 2012 en la categoría “calle experience”. Participé en exhibiciones colectivas de Casa Ensamble en 2010 y 2011. “Arte Chiquito” y “Ni con el pétalo de una rosa”. En Arte Américas Miami Beach Convention Center 2011 con “Todo tiene logo”. Me he desempeñado como proveedora de fotografía editorial, de arquitectura interior y de producto. Actualmente me interesa la fotografía como herramienta poderosa y profunda de investigación, tengo preferencia por los temas que involucran la experiencia de mujeres.